La gente está preocupada por la creciente inseguridad, y no es para menos. Una de las grandes causas de esto es la falta de luz en las calles, plazas y barrios. Las zonas oscuras son el lugar perfecto para que los delincuentes ataquen sin ser vistos.
El peligro aumenta durante la noche y la madrugada, cuando hay menos movimiento y la presencia policial es más baja.
Uno de los robos más comunes es el famoso “arrebato”. En este tipo de asalto, el ladrón se acerca rápidamente y en un movimiento veloz arrebata un objeto de valor. Suele pasar en lugares llenos de gente, como paradas de colectivos, calles comerciales o zonas transitadas. Los objetos más buscados por los bandidos son celulares, carteras, mochilas, relojes, bicicletas y joyas. En muchas ocasiones los delincuentes optan por atacar con armas blancas o de fuego y suelen utilizar motocicletas o bicicletas para facilitar el escape.
Para evitar ser víctima de un arrebato, las autoridades recomiendan:
- Conserva tus objetos de valor fuera de la vista.
- Mantente atento a tu entorno, especialmente en zonas de riesgo.
- Evita el uso del celular o mostrar pertenencias de valor en lugares muy transitados.
- Llevar bolsos o mochilas cruzados y pegados al cuerpo.
- Evitar andar solo/a y tratar de circular por zonas bien iluminadas y concurridas.
Si bien algunas mujeres han optado por empezar a llevar gas pimienta en la mochila o cartera como una forma de defensa personal.
Cabe destacar que en el último tiempo las estadísticas señalan que hay departamentos de la zona este que superan ampliamente los 70 arrebatos semanales, lo cual refleja claramente que es un delito en continuo crecimiento.