Expresó en comunicación telefónica con FM Regional 106.9 Gabriel Guardia, referente del sector olivícola, quien nos contó cómo está la situación en cuanto a producción y gestión del Estado.
Tras la repercusión que tuvo la campaña realizada por artistas mendocinos bajo el el hashtag #YoProtejoLosOlivos, lanzada a través de un video para concientizar por la tala de olivares que perjudica seriamente a la actividad olivícola, nuestro medio le consultó a un referente en el tema sobre la situación actual del sector para lo cual comenzó diciendo: “Año a año nosotros vemos cómo van cayendo los productores, cómo se van achicando la finca y cómo van arrancando olivos a tal punto que nosotros hoy no podemos armar una programación de cosecha con aceituna de Mendoza, porque no se sabe nunca qué es lo que se va a conseguir y qué no. Entonces tenemos que traer aceituna de San Juan”.
“A causa de todo esto hemos empezado hacer un movimiento para poder recuperar lo que se perdió. Los árboles que tenían 100 años no van a volver, todos los que se han cortado y se han hecho barrios ahí tampoco, pero necesitamos una reconversión de los cultivos, necesitamos una política de Estado para poder recuperar lo que perdimos. En su momento Mendoza fue primera producción de aceitunas y hoy en día somos la última y el problema de fondo es que el productor no gana plata, ni siquiera la empata, pierde. Y cuando uno cruza a San Juan te das cuenta lo bien que lo han hecho ellos, La Rioja, Catamarca, incluso hasta San Luis también, en política gubernamental. O por ejemplo en España se tiene un subsidio grandísimo para el agro, le pagan al productor 50% por kilo de aceituna cosechada y esto no va a pasar lamentablemente”, agregó Gabriel.
Quien también recordó: “San Martín tuvo las dos empresas en aceitunas más grandes del mundo. Una en Barriales y otra sobre el Acceso Este. Camacho y Agro Sevilla, que son las dos empresas que se reparten en el negocio en el mundo de aceituna en conserva y estuvieron las dos asentadas en San Martín y las dos la supimos perder por temas inflacionarias y por falta de fruta. Allí se perdieron fuentes laborales no sólo las directas que te mueven las fábricas, sino todas las del costado, porque si tenés cosecha, tenés cosechadores, si tenés cosechadores tenés tipos que hacen las viandas, el transporte para llevarlos a la finca y tenés el que te vende la máquina para el riego. Además del transporte de la aceituna hacia la fábrica. Entonces tenés un montón de cosas que se generan y no las aprovechamos. Nosotros los mendocinos vivimos del agro por eso considero muy loco que siendo agro en general es lo que está más descuidado”.
Por redacción.
