A Regional TV los vecinos indignados dieron sus testimonios.
El hecho se produjo anoche pasadas las 23 horas en el Carril Nuevo de Los Barriales al 3.620 del Departamento de Junín, cuando en el domicilio ubicado en el lugar se encontraba Carlos Victorio Gruini Campana (64) junto a su esposa, Isabel García (63), quien salió a la casa de la hija que vive a 20 metros y cuando regresó cerca de la media hora se encontró con la casa desordenada y la sorprendieron dos malvivientes a los cuales no pudo identificar.
Los sujetos la llevaron al interior de una habitación, donde le ataron las manos y le pegaron en la cabeza, en la espalda y le exigieron dinero en efectivo. Ella con temor le entregó dos cheques, mientras los delincuentes le pedían que no grite, sino iban a tomar represalias contra su marido a quien no había podido ver aún.
Una vez que tuvieron el efectivo y los cheques, los individuos se retiraron de la casa y se dieron a la fuga, entonces allí la mujer comenzó a pedir ayuda y los vecinos se acercaron y la encontraron a ella maniatada y al marido en el patio, detrás de un trailer todo golpeado.
Cuando llegó personal del SEC, el Dr. Rodolfo Luján lamentablemente confirmó el deceso de Gruini Campana. Tenía un golpe en la cabeza aunque todavía no pueden precisar con qué elemento se lo hicieron. En tanto que la señora no presentó lesiones pero está en estado de shock.
Los asaltantes, se llevaron 80 mil pesos en efectivo y los mencionados cheques de los cuales se desconoce el monto.
En tanto con el pasar de las horas se conocieron más detalles del aberrante asalto y a Regional TV confirmaron autoridades policiales, macabros datos sobre la forma en que murió la víctima. Según indicaron, de la boca del fallecido extrajeron un pedazo de tela que sería el que le habían introducido los delincuentes para provocar que muriera por asfixia. Se trataría de la manga de la propia camisa de Gruini.
https://youtu.be/3n5766nbPD0
Por su parte Miriam, vecina de la familia marcó que no es un hecho aislado, «Hace 30 días nos sucedía prácticamente lo mismo en mi casa. Estos delincuentes entraron a mi vivienda que es muy humilde, donde no tengo casi nada y lo destrozaron a golpes a mi papá de 94 años. De milagro no perdió la vida. Estamos hartos de vivir así».
