La pobreza aumentó a un alarmante 55,5% de la población en el primer trimestre de 2024. Así lo estimó el director del Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina (UCA).
Cecilia Llaver, nutricionista y decana de la Facultad de Ciencias de la Nutrición de la Universidad Maza, en diálogo exclusivo con nuestro medio nos deja orientaciones para mantener una alimentación saludable y equilibrada en medio de la crisis que vive en el país.
“Es alarmante como va creciendo el índice de la pobreza en nuestro país, sobre todo la cantidad de niños que están bajo el índice de pobreza. Esto tiene un impacto en el desarrollo de los niños que se verá cuando lleguen a la vida adulta.” Declara la nutricionista.
Además, agrega: sé que es muy difícil para una familia que tienen tres hijos que cada uno coma dos frutas al día, porque implicaría diez frutas al día y están a un precio bastante alto. Hay que tratar de elegir las frutas que son de estación, compartir la fruta, cuando son niños más chicos.
“El mensaje es también para las meriendas escolares, al gobierno de la provincia que asiste a las escuelas, que quizás, en vez de gastar dinero en té, en tortitas o en productos que no sean nutritivos para los niños, aportarles una fruta.” Enfatiza.
“La leche, la carne, los huevos, son alimentos que tienen proteínas que el niño necesita para su crecimiento y desarrollo. Hoy la agente se está volcando a comprar segundas marcas, no importa. Lo importante es poder comprar alimentos como leche, legumbre e hidratos de carbonos para obtener energía. La alimentación tiene que ser variada y consumir frutas y verduras de estación.” Explica Cecilia Llaver.
En relación al consumo de carne, menciona que además de proteínas, las carnes, aportan hierro de buena calidad y zinc, otro mineral que van de la mano y son óptimos para el crecimiento saludable de los niños. Y cuando hablamos de carne, hablamos de todo tipo de carne. La carne molida no es recomendable para menores de cinco años por el síndrome urémico hemolítico, lo demás siempre que esté bien cocido está bien.
Finalmente, recomienda el consumo de agua como bebida ideal. “Muchas veces las familias acostumbran a los niños a no tomar agua sino a que toman jugos artificiales o gaseosas que están muy caras, cuando deberían acostumbrarlos a tomar agua. El agua es un alimento que está en las guías alimentarias, es un alimento que el cuerpo necesita para que se lleven a cabo un montón de funciones dentro del organismo.”
