Manifestó a nuestro medio Carlos Damin, Jefe del Servicio de Toxicología del Hospital Fernández.
Cada vez son más los niños y adolescentes que realizan un consumo excesivo de alcohol. Es clave el acompañamiento del Estado, la sociedad y los padres, para revertir la situación.
Los especialistas advierten que el consumo de alcohol y marihuana en adolescentes, suele darse alrededor de los 13 años.
De este tema estuvimos hablando con Carlos Damin, Jefe del Servicio de Toxicología del Hospital Fernández.
“Es un problema que venimos arrastrando durante los últimos 20 años y cada vez va empeorando; es mayor el consumo y en edades cada vez más chicas. Hoy estamos con la edad de inicio de alcohol en los 13 años, que coincide con el inicio en marihuana, otra cosa que nos alarma mucho. Pareciera que no tenemos una conducta adulta para intentar cambiar esto”.
La edad en la que los chicos se introducen en la ingesta de alcohol, tiene que ver con el ingreso a las escuelas secundarias.
“Tenemos en algunos casos chicos que terminan la escuela primaria y festejan con alcohol. De acuerdo a la última estadística de 2017 de SEDRONAR, el 54,4% de niños o adolescentes de 12 a 17 años, consume alcohol. A partir de los 17 años, el porcentaje sube y llega al 95% en la gente de 25 y 30 años” explicó el especialista.
En esta problemática es fundamental el rol de los adultos para acompañar y contener a los adolescentes. La ingesta de alcohol puede provocar daños severos a nivel neurológicos.
“La venta de alcohol está prohibida en menores de 18 años porque el cerebro no está desarrollado lo suficiente y las intoxicaciones por alcohol, alteran y destruyen la interconexión de las neuronas. Esto pone en riesgo la salud neurológica de esa persona a 25 o 30 años”.
Entre las bebidas que más suelen consumir los adolescentes se encuentra la cerveza, el fernet y el vodka con algunos jugos.
Acerca de los principales problemas que pueden tener los adolescentes por el consumo de alcohol, el especialista destacó “Lo que podemos tener son accidentes caseros, alteraciones en el comportamiento y bajo rendimiento escolar. También hay otro tipo de complicaciones como embarazos no deseados y enfermedades de transmisión sexual, producto del descuido en el consumo de alcohol”.
Coma alcohólico
Una ingesta excesiva de alcohol puede derivar en un coma alcohólico. Esta condición puede suponer la muerte de la persona en algunos casos.
Sobre esto, el medico advirtió “Va aumentando la concentración de alcohol en sangre y esto va produciendo una suerte de anestesia al alcohol. A medida que va aumentando la concentración va produciendo deterioro de sensorio, y cuando pasa el nivel de 5gs produce un coma. Cuando alguien tomó mucho, y está por encima de 3gs, uno suele decir que está al borde del coma porque es el paso previo”.
Por otra parte, indicó “No solamente el alcohol puede producir la muerte, sino que esa situación produce un impacto neurológico que va a evidenciarse muchos años después”.
Los profesionales hacen hincapié en el acompañamiento y contención por parte de los distintos actores de la sociedad.
“Tenemos que actuar juntos, el Estado controlando para que no se venda, la sociedad responsabilizándose para no hacerlo, y los padres controlando que esto no ocurra y poniendo limites en casa. Esto es un problema de todos” cerró el profesional.
Por redacción.