Y las zonas rurales que en la Provincia son muchas quedan relegadas a ingeniárselas como pueden para poder acceder a servicios básicos; ya sean educativos, sanitarios o bancarios.
FM Regional 106.9 en lo que va de la cuarentena obligatoria por la pandemia de Covid-19 se ha hecho eco de varios reclamos y todos ellos precisamente de comunidades que están retiradas de las zonas urbanas de los departamentos esteños. Se trata de las personas que viven en los pueblitos donde el acceso a todo es difícil normalmente y en tiempos de cuarentena es casi imposible.
Ayer justamente dábamos a conocer la problemática de vecinos de Alto Verde, quienes para poder comprar un medicamento deben viajar a Giagnoni ya que en la farmacia que hay en el lugar no reciben la receta electrónica. Además de señalar que hay muchos adultos mayores que se ven perjudicados ante la falta de atención y elaboración de recetas a PAMI en el Centro de Salud distrital.
Anteriormente planteábamos la problemática que se generaba en algunos distritos donde los estudiantes no tienen acceso a internet ni aparatos tecnológicos para poder ser parte de la educación virtual que se está desarrollando en el marco de la pandemia.
Por otra parte hacíamos pública también la denuncia de algunos santarrosinos y sanmartinianos, que reclamaban sobreprecios en los almacenes de los barrios, donde aconsejan comprar para evitar movilizarse y acudir a supermercados porque allí hay mayor cantidad de personas y por ende mayor riesgo de contagio del Covid-19.
Tema aparte mencionar la odisea que significa hacer un trámite bancario, ya que la atención restringida y por medio de turnos en las entidades bancarias complica aún más a los adultos mayores y clientes en general que viven a varios kilómetros de donde se encuentran ubicados estos bancos, que es justamente en los centros de las ciudades. No es la primera vez que FM Regional publica una nota sobre el pedido de cajeros automáticos y/o sucursales solicitados por quienes viven retirados.
Parece ser que todas estas problemáticas se desarrollan en un mundo paralelo al planteado por el Gobierno, ya que el Ejecutivo anuncia día a día con bombos y platillos las acciones que se están desarrollando para combatir el virus pero así también para garantizar la salud, la educación y el acceso a todos los servicios. No es por desmerecer todo el esfuerzo que se está haciendo porque claro está que es enorme y que esta situación desborda cualquier gestión, pero el planteo que se hace es para solicitar que este empeño se vea reflejado en cada rincón y no que los más alejados siempre queden relegados a la deriva y se las tengan que arreglar como puedan para sobrevivir.
Por redacción.