La cuarentena obligatoria por la pandemia de Covid-19 (Coronavirus) ha generado algunos inconvenientes, entre ellos a quienes trabajan con sus vehículos, los cuales funcionan a Gas Comprimido (GNC) y se les venció en el mes de marzo la oblea que le permite la habilitación de la recarga del suministro.
Si bien desde el Ente Nacional de Regulación del Gas informaron que esta renovación de obleas se iba a permitir hacer para los que tuvieron su vencimiento en el mes de marzo y cuyo titular esté dentro únicamente del grupo de exceptuados de la cuarentena, lo cierto es que quienes están pasando por esta situación de querer renovar la oblea vencida el mes pasado, no tienen dónde hacerlo en la Provincia.
Por ejemplo en la zona Este sólo hay dos distribuidores encargados de vender las obleas y ninguno de los dos está trabajando porque no están dentro de los comercios exceptuados.
La problemática incluye a panaderos, repartidores y demás rubros exceptuados por estar incluidos dentro de la cadena alimenticia y que utilizan su auto a gas, ya que es más barato para hacer la distribución.
En ese marco Ricardo, un repartidor de pan expresó a nuestro medio: “El margen de ganancias que tengo de por sí ya es mínimo con mi vehículo a gas, ahora si tengo que salir a repartir a nafta directamente no me conviene, no puedo hacerlo más. No puedo vivir de esto así”.
Cabe señalar que en un principio se habló de la posibilidad de que (frente a la mencionada problemática) las estaciones de servicio cargaran GNC a quienes se les ha vencido la oblea y están exeptuados, pero la notificación de Energas que regularía dicha acción no llegó nunca, por ende las estaciones son rigurosas en el control de la oblea y si no están en vigencia, no cargan.
“Nuestros controles son estrictos, no podemos cargarle a nadie que no tenga la oblea habilitada porque en el caso de que haya un accidente la responsabilidad será nuestra, por tal motivo no podemos asumir ese riesgo”, argumento al ser consultado un empleado de una estación de servicio.
Otro de los eslabones de la cadena afectado en la materia, es el mecánico que vende las obleas, si tenemos en cuenta que en el rubro no se ha podido trabajar durante estas últimas semanas y por consiguiente no tiene ingresos, pero sí el buroberitas, quien es el encargado de controlar a los talleres y de habilitarlos en caso de que tengan las normas de seguridad correspondientes, este año debido a la crisis y a la falta de movimiento en la economía decidió cobrar su impuesto en una sola cuota anual.
Antes este monto que es de aproximadamente 20 mil por habilitación anual se prorrogaba en cuotas mensuales, pero desde este año el arancel se paga de una sola vez, es decir en una cuota total que se vence en el mes de abril. Totalmente absurdo si contemplamos que el trabajador no ha podido siquiera abrir durante casi el último mes.
“Encima que no podemos trabajar, tenemos que adelantar el pago anual para poder continuar habilitado, este país es una locura, así no podemos seguir más ya”, manifestó a Regional Raúl, uno de los tantos mecánicos que está perjudicado grandemente con todo esto.
Por redacción.