Para ello es que enviaron al Congreso un proyecto de ley para la modificación.
El Gobierno anunció hoy que enviará al Congreso la ley de reforma para el Fortalecimiento Electoral, que implica la eliminación de las PASO, la modificación de la ley Orgánica de Partidos Políticos y el sistema de financiamiento de las fuerzas que compiten en los comicios.
De acuerdo con la información suministrada por el Gobierno, las medidas a implementar, en caso de que prospere la norma en el parlamento, serían «el aumento de topes de aportes privados, la eliminación de los espacios de publicidad electoral y la eliminación del financiamiento público para las campañas», por lo que «quedará vigente un único aporte por año proporcional a los resultados electorales». También, se reduciría la prohibición de hacer encuestas de «8 días a 3 días anteriores a cada elección», y la creación de la figura del fiscal general ante la Cámara Nacional Electoral».
Sobre la modificación de la ley Orgánica de Partidos Políticos, el Gobierno la justificó en el objetivo de «mejorar la representatividad» electoral y evitar la proliferación de «sellos de goma» cuyo objetivo es «recaudatorio» y de avanzar con la reforma, las agrupaciones partidarias deberán contar con «0,5% de afiliados sobre el padrón electoral y tener un piso mínimo de 3% de los votos en dos elecciones consecutivas».
En el caso de los partidos nacionales, «se les exigirá presencia en al menos diez distritos, cuando hoy se requieren cinco jurisdicciones», precisó Presidencia.
A su vez, se presentará «una plataforma digital para gestionar afiliaciones y revalidaciones, y las agrupaciones tendrán hasta el año 2026 como plazo para adecuarse a esta nueva normativa».
En cuanto al régimen de financiamiento electoral, el Gobierno propone suprimir el aporte del Estado para campañas políticas y eliminar los topes de las donaciones privadas y se busca “reducir el gasto público y transparentar los recursos que reciben los partidos”.