Continúa la modalidad de acceder a viajes un año antes y en cuotas sin interés.
La crisis económica y social que atraviesa a nuestro país no es algo nuevo. Sin embargo, a pesar de la inflación, los viajes de egresados se siguen eligiendo como opción ineludible.
Se considera casi una tradición actualmente, que al finalizar la escuela secundaria se realice presentación de campera, fiesta de egresados y por supuesto, viajes.
A diferencia de la indumentaria y la fiesta, las empresas de viajes continúan utilizando una modalidad que logra mantener sus ventas en paquetes de viaje. Se debe contratar entre 12 a 18 meses antes del servicio, y además, realizar un plan de pago donde no se incluyen intereses.
Claramente, a partir de un análisis de mercado se sigue una lista de pasos que asegura el correcto desarrollo de la venta. Se trata de estimar la cantidad de asistentes, y partiendo de ello efectuar la compra de hotelería, transporte e incluso excursiones.
De esta manera, los padres tienen la tranquilidad y sobre todo seguridad que a pesar de la inflación el precio no cambia. En el caso de los otros elementos como indumentaria y fiesta sí.
Los salones de fiestas, en algunos particulares de la misma Zona Este, aumentan el valor de la tarjeta tanto para acceder a la cena como para el baile hasta dos meses antes del festejo.
Y por supuesto, con la indumentaria se modifica el precio según la cancelación del producto y muchos factores que influyen.De esta manera resulta dificultoso para las familias acompañar a los egresados a la fiesta o poder comprar toda la indumentaria elegida por los estudiantes.
