La pandemia ha generado nuevas formas de vida en todos los sectores de la sociedad. Los cambios de hábito se han hecho notar en la ciudadanía de las principales ciudades del mundo y las profesiones al igual que la situación laboral de muchos, se ha tergiversado para sobrepasar las cuarentenas obligatorias para frenar el avance del Covid-19.
Desde esta perspectiva, nos preguntamos sobre la situación de quienes no pueden dejar de trabajar y cumplir con la cuarentena, porque son quienes abastecen al país con sustancias alimenticias: Los Transportistas.
Se conoció recientemente que en España (uno de los lugares donde existe uno de los mayores focos del contagio) se implementaron medidas solidarias para ayudar a las personas del rubro del transporte de carga. Bajo el lema «Coja lo que necesite» diferentes autoservicios y hoteles implementaron una camioneta de comida rápida, cedida gratuitamente, dotada con agua, refrescos, snakcs, dulces, café y leche. Pero con una gran salvedad: no admiten que las personas dejen dinero. Éstas medidas, acompañan a un gran sector de la sociedad que se enfrenta a una situación difícil donde hay aproximadamente 47.000 contagiados y suma 3434 muertes.
Ahora bien ¿Cómo está la situación de los transportistas en el país, pero sobretodo en Mendoza? Es la pregunta que se hacen muchos en épocas donde la cosecha nuclea a miles de camioneros de la provincia.
Actualmente los transportistas que egresan e ingresan a la provincia se someten a una declaración jurada, donde se deja justificado el tipo de carga y los datos del chofer. Además ISCAMEN trabaja en todos los pasos interprovinciales con las desinfecciones pertinentes. Pero en casos mas cercanos, se conoció a (raíz de diversas denuncias a Radio Regional 106.9) que muchos choferes están padeciendo abandono por parte de diversas estaciones de servicio, donde no solo se los atiende de manera diferente, sino también donde se les rechaza el servicio de baños y duchas para higienizarse; teniendo en cuenta que muchos de sus viajes suelen demorar más de 3 días.
Aquí en el departamento de San Martín, diversas bodegas han tomado medidas de prevención ante el cuidado de la salud, como por ejemplo no permitiéndole al transportista bajarse del camión hasta el ingreso a la descarga y cerrando puestos de comidas rápidas que se generan en las entradas a las bodegas. También la prohibición a los vendedores ambulantes que se acercan a las largas filas de camiones que suelen pasar mas de 12 horas para su descarga de uva. Una situación preocupante que no deja de entristecernos debido a la importancia de éstos para la vida de la sociedad y las economías regionales.
Por: redacción