Elián Valenzuela, conocido popularmente como L-Gante, recibió una condena de tres años de prisión en suspenso por hallarse culpable del delito de amenazas coactivas y calificadas por el uso de armas, además del delito de daño.
En charla con Radio Regional, el abogado Hugo López Carribero dio más detalles sobre la causa contra el artista, quien no quedará tras las rejas: “El Código Penal, en su artículo 26, le da al juez la posibilidad de decirle a la persona que ha sido condenada ‘mire, le aplico una pena de tres años de prisión y se la dejo en suspenso, porque creo que no es necesario que usted vaya a la cárcel, pero durante estos tres años usted va a ser vigilado por el patronato de los liberados, se va a tener que presentar una vez por semana acá al tribunal y va a asumir una serie de reglas de conducta, no cometer nuevos delitos, no abusar de las bebidas alcohólicas, no consumir estupefacientes, no tener contacto con las víctimas’. La condena de ejecución condicional está contemplada como un instituto en el Código Penal. Si es una pena superior a tres años, tiene que ir a cumplirla sí o sí, como se dice habitualmente, a la cárcel”
“Este chico L-Gante, llegó a juicio por la base de tres delitos: privación ilegal de la libertad, amenazas y, el tercero, daño. Pero fue absuelto por la privación ilegal de la libertad, ese era el delito más grave, si lo condenaban por ese delito, iba preso. Lo condenaron por los delitos menores y, en ese punto, se le otorgó este beneficio”, apuntó el letrado sobre los puntos más importantes de la causa.
López Carribero también confirmó que la sentencia puede ser apelada por los abogados del artista: “Es susceptible de ser apelada. Yo creo que a la Defensa no le conviene apelar, le conviene dejar así como están las cosas. Salió bien la situación. Terminó condenado, pero se cerró la causa con él en libertad. Quien puede apelar es la Fiscalía, y en ese caso insistir en que vaya a preso”
“En los casos de que quiera salir del país tiene que pedir permiso. Y en ese permiso siempre se le solicita que diga qué día va a irse, qué día va a volver y en qué hotel va a estar alojado. Por cuestiones laborales, mayormente los jueces no ponen ningún tipo de objeción, pero tiene que cumplir con eso”, cerró el magistrado.
