El caso de Agustina Tramontana, la joven moza agredida en la Aristides, sacó a la luz la situación que atraviesan muchos trabajadores del sector gastronómico.
Los mozos son quienes te proporcionan el servicio a la mesa y en muchas oportunidades, son víctimas de maltrato, gritos, faltas de respeto y agresiones físicas y verbales.
Dante Dambola, de la Agrupación de Trabajadores Hoteleros Gastronómicos de Mendoza, indicó a nuestro medio “La carencia que están teniendo los compañeros de trabajo parte de la representación sindical. Lo que pasó ahora fue un disparador trágico, el estado de vulnerabilidad de nuestros compañeros es muy grande”.
El representante aseguró que “el acoso es permanente, tanto en mujeres como hombres”; y sostuvo que el sindicato y los empleadores deben cumplir con sus funciones en resguardo de los trabajadores.
“El sindicato debería trabajar como ente controlador para que todas las condiciones se cumplan, al igual que el empleador. Hay muchos trabajadores en negro, si tienen un accidente no les cubre, se lo tienen que cubrir ellos con un salario básico y entonces lo que hacen es pelear por las propinas. Una de las patas no funciona porque no controla y tendría que controlar” explicó Dambola.
Acerca de los protocolos para evitar este tipo de incidentes, el representante declaró que debe haber una persona de seguridad preparada en el lugar para abordar el caso.
“Es necesario que en el lugar haya una persona de seguridad, que esté capacitado en esa materia. Muchas veces tiene que salir el mozo o el encargado a decir que no rompan una silla o no tiren un vaso y la forma en la que se dice no es la adecuada, porque no están capacitados para eso. Tiene que existir una persona que pueda mediar esa situación para que esto no pase”.
Por otra parte, Dambola planteó que el encargado debe tener en cuenta hasta qué punto vende alcohol en su local.
“Cuando trabajas en gastronomía te das cuenta inmediatamente cuando una persona está alcoholizada. Te das cuenta como llega, los movimientos, las respuestas que tiene y lo que ha tomado” expresó.
Además se refirió a la parte sindical y opinó “Nosotros como agrupación no tenemos representatividad sindical. No tenemos buena llegada con el sindicato, no nos abre las puertas y lo que hacemos es trabajarlo nosotros desde adentro y asesorar a los miembros. Hay mucha gente en negro y se debe estar articulando para achicar lo que sucedió porque fue muy grave el disparador”.
Desde la agrupación de Trabajadores Hoteleros Gastronómicos se mostraron a disposición de Agustina; y pidieron a las instituciones correspondientes que intervengan en el caso.
Por redacción.