Si bien la cosecha quedó exenta de la cuarentena total impuesta anoche por el Gobierno nacional en el marco de las acciones de prevención por el Covid-19, el gran interrogante ahora es cómo se las ingeniarán los productores para poder tener el dinero para pagarle las fichas al cosechador.
Es que con los bancos cerrados hasta el 31 de marzo y sin ningún aviso previo, los productores no podrán disponer del efectivo que necesitan para poder tener las fichas y pagarle a los cosechadores. Y como es trabajo al tanto y se vive del día a día, los trabajadores no cosecharán si saben que no hay plata.
Por otra parte los bodegueros también se ven afectados porque no tienen con qué solventar el anticipo. Entonces la situación se vuelve aún más difícil, ya que se garantizó que no se prohíba la actividad, pero el no poder disponer de dinero hace que de igual manera se produzca un stand by en el sector.
Por redacción.