Un allanamiento histórico en la provincia de Buenos Aires permitió detener una red de personas que tenían y comercializaban todo tipo de pornografía infantil y que volvió a poner en alerta a las autoridades.
Por este hecho y en relación al Día Internacional de la Lucha contra el Grooming, que es este miércoles 13 de noviembre, Radio Regional entrevistó al licenciado Juan Bogado, especialista en cibercrimen.
“La verdad que la problemática es terrible, es algo que en sí rompe barreras de todo tipo, barreras sociales, barreras económicas. Es un gran volumen de información, volumen muy grande de activos, lo que se mueve con este tipo de delitos y, lejos de desaparecer, tenemos lamentablemente muchos más casos”, comentó el perito forense sobre la magnitud de este delito.
Bogado detalló también cómo es el método que utilizan los delincuentes para captar jóvenes: “El medio más utilizado en la República Argentina es el WhatsApp, pero no es que ingresan primeramente por WhatsApp, lo primero que hacen es buscarlo en redes sociales y me dirán, ¿qué hacen los menores en redes sociales? Bueno, allí tenemos un problema de educación digital tremendo, no solamente en la República Argentina, sino en toda Latinoamérica. Argentina es el segundo país con más casos de grooming y eso es alarmante. Este modo operandi lo que hace es captar a los niños, ganarse su confianza con lo que sea, redes sociales o con juegos en línea. Una vez que se logra la confianza, lo que hace en sí el pederasta es buscar un medio más directo de contacto que suele ser un WhatsApp”
“Desde el año 2003 el grooming es un delito penal, está en el 131 del Código Penal Argentino. Ahora, las penas son de 6 meses a 4 años. O sea, todavía las penas de grooming son muy pocas. Nos pasa con muchos de los delitos informáticos en que las penas son de 6 meses a 3 años y son cosas que obviamente son excarcelables, no pasa nada, y entonces seguimos con las cosas como estamos”, detalló el entrevistado, quien también es docente universitario.
Consejos a tener en cuenta
Bogado brindó también una serie de tips a la hora de poder evitar este tipo de situaciones con los más chicos: “Hablar con ellos es imprescindible. Yo con todos mis hijos he hablado de qué ven, ‘acordate que papá trabaja de esto, ayúdame. Vos sos mi principal colaborador, advertime, decime de qué tengo que tener cuidado. ¿Te diste cuenta que en algún momento pudieron haber adultos en la sala del chat de tu juego?’ Y ellos me dicen ‘sí, nos damos cuenta’. ‘¿Y cómo te das cuenta?’ ‘Por lo que piden’. Y ahí me empiezo a alertar”
“’¿Y qué hacen ustedes?’ ‘Nos avisamos’. O sea, me lo está diciendo un niño de nueve años, que se avisan cuando ellos advierten un chacal, pero no todas las personas han accedido a la información de qué es un chacal, o qué es un pederasta, o qué es un abusador. Entonces, los niños que no han tenido esa información están muchísimo más en riesgo porque podrían no advertirlo. Ese control es necesario, pero para poder controlar sin abordar su intimidad, tenemos que hablar con ellos y explicarle por qué hacemos eso. Redes sociales no deberían tener menores de 13 años, y yo lo extendería también a los 15. ¿Por qué digo que no es necesario o que es un peligro? Porque los chicos no están preparados para lo que sucede en las redes”, detalló el especialista en ciber crimen.
El groming en el país y la falta de recursos
Por último, Bogado hizo referencia a todos los puntos que falta trabajar para mejorar la lucha contra el crimen virtual: “Nos faltan recursos, nos falta tecnología, nos falta capacitación a nivel internacional, nos faltan leyes más adecuadas para combatirlo, nos falta que la justicia nos entienda y pueda configurar y catalogar estos delitos de una manera adecuada. Nos falta un montón de cosas”
“Lo que cambió es la curva. La curva era exponencial positiva, o sea que cada vez se disparaba más, y lo que logramos fue frenarla y hacer que la curva sea negativa. Quiere decir que, si bien sigue creciendo, la cosa sigue yendo para abajo, y en algún momento quizás todos nuestros niños, niñas y adolescentes, a partir de la edad escolar, van a tener cierto control de lo que significa este tipo de problemas”, cerró el perito forense.